Roadtrip con Anna Lisa Wagner
La rubia de Arizona que fue descubierta por accidente, es adorada gracias a sus largas piernas y enorme presencia donde sea que se presente.
¿Cómo llegaste al modelaje?
Empecé cuando era adolescente. Me descubrieron durante un concierto.
¿De qué fue el concierto?
Fue la primera gira de American Idol con Kelly Clarkson, lo cual es divertidísimo. Toda mi vida he sido muy alta para mi edad, así que cuando tenía 14 años, medía alrededor de 1.73 m. El agente se me acercó, me dio su tarjeta y me dijo que creía que me iría muy bien como modelo. Cuando llegué a casa, se lo conté a mi madre y ella me animó. Un año después, firmé con Ford Models.
¿De quién obtuviste tus piernas tan largas?
Mi padre es alemán y mi madre es yugoslava, tal vez sea por eso. Yo nací en Buchholz, Alemania, pero nos mudamos a Arizona cuando era pequeña, así que me siento 100 por ciento estadounidense.
¿Cuál fue tu primer trabajo como modelo?
Fue justo después de haber firmado. Tuve que ir a Los Ángeles. Tenía cara de bebé. Fue mi primera sesión real. Fui la chica más genial de la escuela durante una semana.
¿Qué hubieras hecho si no te hubieran encontrado?
Soy muy creativa y necesito ese tipo de actividades. Empecé a pintar con acuarela y óleo cuando tenía seis años. Probablemente me hubiera quedado con eso.
¿Todavía pintas?
A veces, pero no tan a menudo. Sin embargo, hago mucha fotografía. Gasto la mayor parte de mi energía en modelar, pero fotografío mucho de mi propio trabajo y organizo mis propios viajes. Hago un newsletter y colaboro con los fotógrafos que me toman fotos, y generalmente envío algunas cosas geniales sin censura, así como otras cosas, como polaroids especiales a la venta o enlaces al trabajo del fotógrafo que me fotografió. Todo es inclusivo e interactivo. También haré listas de reproducción, lo cual será divertido.
¿Recuerdas tu primera sesión de desnudo?
Estaba en topless, no totalmente desnuda. Estaba trabajando con un amigo fotógrafo. Estábamos haciendo una editorial divertida y yo llevaba una capa de piel. Me reguntó si me sentiría cómoda tirando la capa fuera del camino y él tomaría una foto así. No tenía nada debajo. Siempre me he sentido muy cómoda con mi cuerpo. Cuando vi lo que resultó de la sesión y la diferencia que hizo en la difusión, la creatividad, me encantó. Siempre me han atraído las artes, los desnudos en blanco y negro, así que me metí de lleno. Lo encuentro liberador y fortalecedor. Es muy divertido verme como debería ser vista, como una mujer fuerte e independiente.