Mazunte, belleza y misticismo

Visita Mazunte Lo antes posible

Mazunte es uno de esos lugares que por su sencillez y misticismo atraen cada año a miles de viajeros de todo el mundo en busca de un paraíso perdido.

 

Ubicado en la costa chica de Oaxaca, Mazunte es uno de esos pueblos en los que cada uno de sus rincones se encuentra muy bien cuidado por sus habitantes, quienes hacen un gran esfuerzo por mantener la esencia del lugar y se han organizado para promover edificaciones en armonía con la naturaleza, evitando que las grandes cadenas hoteleras rompan con su encanto.

 

De cualquier modo, las cosas podrían cambiar, por eso te damos algunas razones para visitarlo lo antes posible.

 

Cangrejito azul

 

Mazunte debe su nombre al ‘cangrejito azul’ que en otro tiempo abundaba en las costas del Pacifico, pero que con los años ha ido desapareciendo, entre otras causas, por la caza furtiva destinada para el consumo humano.

 

Otras fuentes señalan que su significado deriva de la palabra en náhuatl ‘maxotetia’, que refiere al hecho de reverenciar la desovación de miles de tortugas que se daban cita cada año en sus playas. Este hecho originó que por mucho tiempo la comercialización de los huevos y carne de estos animalitos se volviera la principal fuente de ingresos para el poblado.

 

Centro Mexicano de la Tortuga Mazunte

 

Por fortuna, a partir de 1990 el Gobierno Federal decretó la protección de todas las especies de tortugas marinas que llegaban a Mazunte como la golfina, prieta, carey y laúd, e inauguró el Museo Vivo de la Tortuga Marina que con el tiempo dio origen al actual Centro Mexicano de la Tortuga encargado de difundir el conocimiento y la conservación de esta icónica especie.

 

 

Paradójicamente las tortugas siguen siendo una de las principales fuentes de ingresos para sus habitantes pero ahora por su preservación. El Centro Mexicano de la Tortuga cuenta con distintas actividades para ayudar a la preservación y liberación de los reptiles. De julio a diciembre, es posible observar la llegada de más de 100 mil ejemplares a playa Escobilla, que vienen a desovar a sus crías para después regresar a las aguas cristalinas del mar; un hermoso espectáculo que solo la naturaleza puede ofrendar.

 

Festival Internacional de Jazz de Mazunte

 

A través de sus calles y costas se respira una cultura local donde reina la paz y la ‘buena vibra’. Tal vez la mejor muestra de ese espíritu sea el Festival Internacional de Jazz que se realiza en la tercera semana de noviembre. Acuden todo tipo de músicos tanto de talla internacional como locales, que no solo tocan el ritmo que le da nombre al evento sino también otros como reggae, rock o trova.

 

 

El ambiente se completa con las exposiciones de arte y actividades acordes con el concepto del festival, como danzas de influencia prehispánica, conferencias o clases de yoga.

 

Punta cometa

 

Al este del poblado se encuentra Punta Cometa, la montaña más sobresaliente del Pacifico Sur. Se dice que es desde aquí de donde se pueden observar los amaneceres y puestas de sol más hermosos del país, y si bien eso no lo podemos demostrar “científicamente”, creemos que cualquiera que haya presenciado uno de ellos, ¡jamás podrá olvidar la experiencia!

 

 

Se accede a través de un camino boscoso. Si se cuenta con un poco de suerte, es posible observar la migración de algunas aves como pelícanos y animales marinos como las ballenas jorobadas. Además, algunas veces los habitantes rinden ceremoniales a la naturaleza, mencionando que son los portadores de una tradición.

 

Gastronomía local

 

La cocina se encuentra equilibrada entre un estilo rústico y los ingredientes que solo puede ofrecer un estado como Oaxaca. Sin lujos excesivos y con una breve búsqueda en ‘Maps’ se puede llegar caminando a los restaurantes que ofrece Mazunte. Nosotros recomendamos La Cuisine, que mezcla la cocina tradicional francesa con un toque del estilo local.

 

 

Si no puedes dejar pasar la oportunidad de comer los productos de mar, a es una excelente opción. Ahora que si eres de los que no varían mucho en la dieta, pero al mismo tiempo te gustaría probar una auténtica delicia, debes visitar El agujón, una pizzería que realiza sus productos en un gigantesco horno de piedra, te aseguramos que será una de las mejores pizzas que hayas probado en la vida.